Primera tarea: El León de Nemea

  Primera tarea: El León de Nemea

El León de Nemea, era un león de gran tamaño, feroz y temible, que asolaba la región matando y devorando personas y ganado, exterminando rebaños y destruyendo plantaciones.

Su piel dorada era indestructible, por ser invulnerable ninguna arma lo podía matar
El León de Nemea era hijo de dos monstruos: Ortro y Equidna y su descendencia también era monstruosa, su morada era una cueva con dos salidas.

Euristeo ordena a Heracles 12 trabajos y el primero es matar al León de Nemea,
Heracles llega a Nemea en busca del León, se hospeda en la casa de Mojorco, los hombres de la región no quisieron colaborar, ni siquiera pronunciar su nombre, temiendo que aparezca de un momento a otro, el León de Nemea no moría, era invencible.

Heracles lleva como armas un arco y flechas y un garrote enorme hecho de un tronco de una encina y una espada de bronce, sigue buscando y encuentra la guarida del león, se esconde entre unos arbustos y espera, al rato ve que el león llega a su morada llevando un cuerpo de un hombre muerto en su hocico, Heracles salta el arbusto y se acerca por detrás al León de Nemea y le dispara sus flechas sin lograr herirlo, las flechas rebotaban, no le causan siquiera un solo rasguño, su piel era invulnerable, la fiera se asusta y huye, ingresa a la cueva, Heracles lo sigue y también ingresa en la guarida y cierra una de las salidas, luego lo ataca con una maza, al león no lo daña, pero retrocede para saltar sobre el semidios, Heracles lucha cuerpo a cuerpo con la fiera, hasta que logra cogerlo del cuello, lo aprisiona, no lo suelta, lo estrangula, el león hace resistencia, hasta que cae desfallecido por estrangulamiento y muere, luego intenta desollarlo, utiliza su espada y cuchillo, pero fue en vano las armas quedaron dañadas.
Atenea disfrazada de anciana le aconsejó que las mejores ramas y herramientas eran las garras y así pudo desollar al león, una vez con la piel y la cabeza, la usó como armadura y yelmo.
Heracles trasladó el cuerpo del león a la ciudad de Micenas ante el rey Euristeo y se entera de la primera victoria del semidios, pero se asusta y le prohibió volver a entrar a la ciudad con sus trofeos y que solo llegase hasta la puerta de la muralla.
Zeus convirtió al león en una constelación.