Deyanira
Heracles contrajo matrimonio con Deyanira, Hija de Eneo, rey de Calidón y Altea y para obtener su mano tuvo que luchar contra el Dios río Aqueloo que tenía el poder de adoptar o cambiar su forma en toro o serpiente, sin embargo Heracles lo dominó y le rompió uno de sus cuernos, que fue cogido por las ninfas Nayades que lo llenaron de flores y frutos, convirtiéndolo en la Cornucopia o Cuerno de la Abundancia, Heracles se llevó a Deyanira, en el camino encontró que el río Eveno se había salido de su cauce y como Deyanira no podía cruzar, se acercó el centauro Neso y se ofreció a ayudarla a cruzar a la otra orilla, mientras Heracles se las arreglaría solo.
Neso enamorado intentó raptar a Deyanira cuando la ayudaba a cruzar el río Euneo y Heracles le dio muerte de un flechazo envenenado, antes de morir Neso convenció a la crédula Deyanira de que su sangre era un potente filtro amoroso, por si alguna vez su marido le era infiel, debía administrárselo para recuperar su amor, así cuando Heracles abandona a Deyanira por Iole, Deyanira empapó la túnica de Heracles con la sangre de envenenada de Neso y al colocarse la túnica Heracles sintió horribles dolores, pues el veneno le quemaba la piel, de tal modo que para no prolongar su sufrimiento se inmolo arrojándose a una pira en lo alto del monte Etna y Deyanira arrepentida se ahorcó.