Argos

El gigante Argos

Argos: (llamado Argos Panoptes) gigante hijo de Hera y Aristor, tenía 100 ojos, mientras dormía con 50 ojos con los otros 50 vigilaba.

Hera descubrió a Zeus con la ninfa Io y para disimular Zeus la convirtió en una vaca, una novilla blanca, Hera advirtió el intento de engaño y le pidió a Zeus que se la regalará, una vez que la obtuvo la entregó a Argos para que la custodiara.

Zeus acudió donde Hermes y le pidió su ayuda, Hermes acudió y adormeció al gigante con la música de su flauta y luego lo mató, 

En compensación Hera lo convirtió en un pavo real; hay muchas otras historias con respecto al gigante Argos y muchas son muy enredadas, muy fantasiosas.

Una de esas versiones dice que Hera colocó los ojos de Argos en la cola de un pavo real.

No confundir con Argos el constructor de barcos que acompañó a Jasón y que a la expedición la llamaron "Argonautas"

Otto y Efialtes

 Otto y Efialtes: gigantes hijos de Poseidón

Otto y Efialtes: gigantes gemelos hijos de Poseidón y Ifimedia esposa de Aloedo (Poseidón sedujo a Ifimedia mezclándose con el río Enipeo), (otra versión dice que son hijos de Gaia) eran llamados Aloadas, que eran fuertes y agresivos y que a los 12 años medían 9 brazas de altura y 9 codos de altura, se rebelaron contra los dioses y quisieron tomar el Olimpo y para lograrlo colocaron el monte Ossa encima del monte Pelión, al verlos Apolo le disparó a Efialtes una flecha en el ojo derecho y Heracles en el ojo izquierdo; (otra versión dice que a Efialtes lo mató Orión)
Otra versión dice que intentaron escalar al Olimpo apilando montañas unas sobre otras, Ares los descubrió e intentó detenerlos pero fue derrotado y los gemelos lo colocaron en una urna de bronce donde permaneció tres meses hasta que Hermes los rescató.
Posteriormente fueron derrotados por Artemisa que se transformó en un ciervo y cuando los gigantes le apuntaron con sus armas, el ciervo fue mas rápido y los cruzó atropellándolos, haciendo que se golpeasen entre ellos, logrando que se disparasen entre ellos con sus propias armas logrando que se mataran ambos.

Hay muchas versiones como la que dice que Artemisa huyó, que los Aloadas permanecen en el Tártaro encadenados, que fundaron muchas ciudades.