El Faro de Alejandría
Faros es una pequeña isla de la ciudad Egipcia, para que sirviera de guía a los navegantes, la que se consideraba como una de las mayores construcciones técnicas de la antigüedad.
Sobre la plataforma superior colocaron un gran espejo metálico que en el día reflejaba la luz del Sol y en la noche proyectaba la luz del fuego a una distancia de hasta 50 kilómetros
El Faro se alzaba sobre una base cuadrada de la que se elevaba una torre octogonal de 134 metros de altura y sobre la plataforma octogonal ardía en las noches un fuego alimentado por leña y resina
Los restos del faro que aún quedaban fueron destruidos por un terremoto y los restos fueron destruidos años después por la avidez del Califa Al Walid que creyó que bajo sus cimientos se hallaba un inmenso tesoro escondido.
Sobre la plataforma superior colocaron un gran espejo metálico que en el día reflejaba la luz del Sol y en la noche proyectaba la luz del fuego a una distancia de hasta 50 kilómetros
El Faro se alzaba sobre una base cuadrada de la que se elevaba una torre octogonal de 134 metros de altura y sobre la plataforma octogonal ardía en las noches un fuego alimentado por leña y resina
Los restos del faro que aún quedaban fueron destruidos por un terremoto y los restos fueron destruidos años después por la avidez del Califa Al Walid que creyó que bajo sus cimientos se hallaba un inmenso tesoro escondido.